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Mensaje Político
Alejandro Lelo de Larrea
El hecho concreto: la candidata de Morena a la Jefatura de Gobierno, Clara Brugada, no asistió al foro “Primer Aniversario de la Conferencia de la Organización de las Naciones sobre el agua”, al que sí acudieron los candidatos a quienes se enfrentará el 2 de junio en las urnas: Santiago Taboada, el verdadero rival, de la alianza Va X la Ciudad de México, y Salomón Chertorivski, de Movimiento Ciudadano.
Trascendieron varias versiones sobre la causa de la inasistencia de Brugada, pero todas la dejan mal parada: que se enfermó, que no le interesó, que la invitación no le llegó y se perdió entre tantas que le hacen, que está replanteando su campaña y decidió guardarse unos días.
Veamos: si Brugada no acudió porque se enfermó, como trascendió entre algunos de los organizadores cercanos a la comunidad de Países Bajos en México, puede haber preocupación sobre si estará en condiciones de hacer campaña 79 días más. Esta versión se fortalece, pues Brugada decidió no tener actividades proselitistas este lunes, tal como lo informó su equipo de campaña el domingo por la noche.
Fuentes del grupo político que la acompaña me dicen que de ninguna manera tiene un problema de salud. Que este lunes no tuvo actividades públicas porque su agenda estaba súper saturada de encuentros de carácter privado. El más importante, me aseguran, una muy relevante comida con Claudia Sheinbaum y destacados empresarios. De haber existido tal reunión quedó en su totalidad como privada, porque hasta el cierre de esta columna no hubo ni fotografías, ni algún comunicado, ni un tuit.
Esta versión de la comida puede ir de la mano con otra que ha trascendido: un replanteamiento global de su campaña, y que de una vez por todas Claudia y Clara cierren filas entre la campaña presidencial y a la Jefatura de Gobierno, sobre todo porque Brugada está en un riesgo real de perder la capital, y ello le restaría votos a Sheinbaum.
La anterior, tampoco es versión validada por el equipo de Brugada, quienes dicen que la realidad es que no asistió a la reunión de la ONU debido a que “no le llegó la invitación”. No tienen idea qué ocurrió, que quizá se perdió entre tantas que le llegan, y tampoco saben quién es el responsable de clasificar las invitaciones. Esto viene a confirmar que sí hay problemas de organización en su campaña, al grado de desdeñar un tema toral para las grandes urbes, y que en el caso de la CDMX va a definir cientos de miles de votos el próximo 2 de junio.
Esta misma excusa de que la invitación no llegó y no se confirmó es la misma que utilizó Sheinbaum la semana pasada para explicar su inasistencia a la Plenaria de los consejeros de Citibanamex.
En el equipo de Brugada reconocen que habría sido gran incongruencia de su parte desdeñar deliberadamente este foro del agua de la ONU, porque el año pasado ese organismo le entregó un reconocimiento por la creación de las Utopías en Iztapalapa. Incluso, Brugada viajó a la sede de las Naciones Unidas en Nueva York para recibir el premio.
‘Haiga sido lo que haiga sido’, Brugada quedó muy mal con la ONU por desairarles su invitación, mientras que Taboada dejó muy buena impresión, y de manera muy sutil quedó evidencia de que la candidata de Morena no quiso enfrentarse a estos especialistas porque la demarcación que gobernó casi 9 años, Iztapalapa, es la de mayor escasez de agua en la capital, lo que evidencia su falta de proyecto sobre el tema.
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