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Luego de que fue derrotada la ministra Yasmín Esquivel, quien era la candidata natural de la “4T” para presidir la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, reconoció que tiene diferencias de proyecto y visión política con quien ganó, la ministra Norma Piña.

En conferencia de prensa en el marco de la inauguración pilares que lleva el nombre del boxeador Ratón Macías, Sheinbaum dijo: “Hay temas en donde ella ha votado en contra de lo que nosotros opinamos, como por ejemplo el tema eléctrico, entonces por eso digo que es evidente que es un avance y es muy importante para el país que haya una mujer presidenta de la Suprema Corte, pero también hay otros temas que como proyecto de nación nos interesa que se avance en el país”.

Sin embargo, la jefa de Gobierno reconoció que es un avanza que, después de 200 años, una mujer encabece el máximo Tribunal de justicia del país, aunque pidió que no se utilice la expresión de que “se rompió el techo de cristal”, a pesar de que es parte de la literatura feminista sobre los derechos humanos.

Explicó su postura: “No me gusta el término romper el techo de cristal y les voy a decir por qué, se usa y es parte de la literatura feminista, de los derechos de las mujeres, pero cuando se dice así parece que es un asunto individual y nosotros queremos que las mujeres, por derecho, participen en la vida pública”.

Parte de la estrategia de Piña después de su elección como presidenta de la Corte y del Consejo de la Judicatura Federal, fue tener acercamientos con los titulares de las principales instituciones, así como gobernadores. También fue el caso de la Ciudad de México.

Esto reveló Sheinbaum de la ministra presidenta: “Ayer ella me llamó, lo cual agradezco, me llamó por teléfono para presentarse, le agradecí la llamada, la felicité y quedamos en la oportunidad de vernos en algún momento y si no siempre la Consejería Jurídica hace, como normalmente abre la Suprema Corte, pues abre a opiniones que tengan que ver con algún tema de la ciudad”.

Esquivel es acaso la ministra más cercana a la “4T”, incluyendo lo que tiene que ver con los intereses económicos. Es esposa del empresario José María Riobóo, quien fue uno de los constructores de los segundos pisos del Periférico, que estuvieron a cargo de Claudia Sheinbaum a principios de los años 2000. También actualmente participa en la reconstrucción de la Línea 12 del Metro.

A propósito del tema de las mujeres empoderadas, Sheinbaum aprovechó para echar agua a su molino, pues dijo que en el México actual, “las mujeres podemos ser todo: senadoras, diputadas, ingenieras, astronautas, presidentas de la República”.

Hoy, en México hay 9 gobernadoras, 8 secretarias de Estado, 4 ministras en la Corte, fiscales, líderes de instituciones legislativas, autónomas, “lo que abre brechas para las niñas y adolescente del país”, remató Sheinbaum.

David Polanco

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