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Mensaje Político
Alejandro Lelo de Larrea
La Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) tardó cuatro días en reaccionar para contener los desmanes de las “Rodadas del Terror”, esos cientos de motociclistas que afectaron severamente la movilidad en principales vialidades de la capital y pusieron en riesgo la vida de transeúntes y quienes circulaban en sus automóviles.
Por fin el miércoles por la noche, policías de la SSC, contuvieron el desorden, cuando el problema estaba ya a punto que se les desbordara.
Sin duda, la tibieza de las autoridades capitalinas, en específico las Secretarías de Movilidad, que encabeza Andrés Lajous, y la SSC, de Omar García Harfuch, fue la causa principal por la que los desmanes escalaron desde el domingo que se dio la primera “Rodada del Terror”. Ese día, cientos de motociclistas invadieron avenidas tan importantes como Insurgentes, Reforma, Circuito Interior, Periférico, incluyendo banquetas, lo que puso en riesgo la vida de transeúntes.
Además, en diversos medios de comunicación y en redes sociales se difundieron videos y fotografías de motociclistas que portaban armas, iban en estado de ebriedad, sin casco, con menores a bordo y otras faltas administrativas e incluso delitos potenciales.
En ese momento, las autoridades debieron prever lo que vendría y estar listos para la contención y disuasión del desorden. Pero al contrario: el lunes por la mañana, Lajous dio permiso a los motociclistas para que continuaran con el desorden.
“Los vehículos pueden circular por las avenidas, muchos o pocos pueden circular por las avenidas; que los vehículos circulen por una avenida no es una invasión, es circular por una avenida”. Es en serio, eso respondió Lajous. Ese lunes, ninguna autoridad de la SSC quiso hablar del tema.
Ante la pasividad de las autoridades, el lunes por la noche, los motociclistas repitieron la “Rodada del Terror”, esta vez en Azcapotzalco. Otra vez, las autoridades de la SSC fueron permisivas. No evitaron el desorden.
El martes pareció que les renovaron el permiso, pues García Harfuch dijo: “Las rodadas de ayer (lunes) fueron muy distintas a las de antier. Ayer se llevaron en paz, se platicó por parte de la Subsecretaría de Operación Policíaca y de Tránsito con varios de los participantes, no hubo incidentes mayores”.
Acaso por esa tibieza, el mismo martes por la noche, volvió la “Rodada del Terror”, esta ocasión en la demarcación Álvaro Obregón. Otra vez, los policías sólo detuvieron a algunos, infracciones y algunas motocicletas al corralón.
Por fin, el miércoles por la noche, la policía capitalina hizo lo que debió hacer desde el domingo: disuadir la invasión de las avenidas en su cuarta “Rodada del Terror”. Esta vez, tres grupos de motociclistas fueron encapsulados por policías de seguridad: uno en la colonia Clavería, Azcapotzalco; otro en Calzada México-Tenochtitlan, Miguel Hidalgo, y un tercero en Coyoacán, en la zona de Insurgentes Sur, muy cerca del Estadio Olímpico Universitario.
Lograron disuadirlos. Se impidió una caravana más de desorden público. Cuatro días después, aunque afortunadamente antes de que se les desbordara el problema.
Y después de esta tardía actuación, la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, planteó que van a modificar el Reglamento de Tránsito para que esta “actividad de diversión” no cause ruido a cierta hora de la noche, que no pare el tráfico y no pongan en riesgo a otras personas. Así, más vale tarde…
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