TRAS LA PUERTA DEL PODER

Roberto Vizcaíno

La grosera, frustrada intervención abierta del presidente Andrés Manuel López Obrador en la búsqueda de un extraordinario para promulgar la Ley Reglamentaria de la Revocación de Mandato podría haber dañado definitivamente su relación con el zacatecano Ricardo Monreal.

Lo que parecía un trámite más, sin mayores consecuencias y bajo el control de Monreal, terminó en una abierta derrota del mandatario mexicano.

Absurdo porque en realidad no hacía falta el extraordinario ya que esa Ley se puede aprobar con la sola mayoría de Morena y aliados apenas inicie el período en septiembre. Todo era producto de los apuros y caprichos de AMLO.

Además el cuarto transitorio de la Reforma para la Revocación de Mandato establece ya procedimientos y fechas.

O sea…

Pero con al parecer todo ya negociado por Monreal, AMLO -sin previo aviso-, envió a Olga Sánchez Cordero a intentar presionar a los coordinadores parlamentarios de PAN, PRI, PRD y MC, quienes la dejaron ahora sí de florero, plantada, y eso llevó al zacatecano a hacerse a un lado. Desde ese momento desapareció de la escena. Ni mensajes por redes ni presencia en el pleno, y menos -como acostumbra en estos casos-, en tribuna.

Los acuerdos internos se vinieron abajo. Y la oposición dio 2 reveses en dos días consecutivos a AMLO. Y en tribuna se cansaron de exhibirlo, burlarse de él.

Sobre todo porque le echaron abajo su extraordinario con apenas 1 voto. Le mostraron lo débil que puede ser a pesar de vivir en Palacio Nacional. Pero sobre todo quedó en evidencia cuánto depende de Monreal.

EL ZACATECANO LE MANDA MENSAJE

Ayer, en lo que podría ser una información normal en este momento de inicio de legislatura y de cambio de equilibrios en San Lázaro -donde el INE informó que Morena y aliados (es decir AMLO) quedan con 278 diputados (50 menos que la legislatura que termina) y la Alianza Opositora (PAN, PRI, PRD y MC) llegan con 222 diputados (50 más que los que tenían)-, la oficina de prensa del Senado emite un resumen de lo hecho en los 3 años anteriores (entre 2018 y 2021).

En este lapso el Senadores -indica el documento-, aprobó 378 asuntos, entre ellos, 30 reformas a la Constitución Política y 30 leyes de nueva creación.

Ello sin que Morena y aliados hayan tenido mayoría constitucional. Es decir, gracias a las negociaciones y acuerdos de Monreal. No se entiende de otra forma.

Ninguna de esas 30 reformas constitucionales requirió de la intervención o negociación del Presidente de la República.

Además en este tiempo el Senado aprobó 30 leyes de nueva creación, 270 cambios a diversos ordenamientos vigentes y 48 temas relacionados con otros decretos.

Con estas reformas y emisión de nuevas leyes, afirma Monreal, se apoyó una transformación profunda de las instituciones como lo requería AMLO y la 4T.

Ahí es dónde se realizó “las grandes reformas para el cambio de régimen”.

Igual se aprobaron 30 instrumentos internacionales y se desahogó mil 345 nombramientos, así como 87 ratificaciones de personal diplomático.

En estos 3 años se realizaron 195 sesiones, de ellas, 171 fueron ordinarias, 16 extraordinarias, 17 solemnes y 9 de Congreso General, con más de mil 137 horas de trabajo.

La pandemia obligó a una transformación dentro del Senado donde, por primera vez se estableció un sistema digital para ir a sesiones a distancia.

Un mensaje claro para quien no entiende ni aprecia ningún mensaje.

¿Hay ruptura?

Lo veremos pronto.

ANAYA INICIA CAMPAÑA EN EU

En una obvia estrategia electoral, el panista Ricardo Anaya aprovechó un amago de la Fiscalía General de la República, para culpar a Andrés Manuel López Obrador de pretender iniciarle un proceso penal amañado con base en declaraciones de Emilio Lozoya y 2 testigos protegidos, y anunció su autoexilio a Estados Unidos donde comenzará su campaña presidencial para el 2024.

La estrategia advierte enormes ventajas para el excandidato presidencial queretano: no se ajustará a tiempos legales electorales en México; tendrá la atención de medios norteamericanos y otros que repercutirán sin ninguna duda en medios mexicanos; tendrá a su disposición la fuerza de las redes sociales desde el imperio que es el centro de estos nuevos medios de comunicación e información; no deberá rendir cuentas a nadie por gastos de precampaña porque actuará como perseguido político no como pre o abierto candidato pero sobre todo irá delante de todos los otros aspirantes en especial los de Morena. Y ya comenzó a tener la atención y respuestas de López Obrador, quien apunta a ser su principal promotor. Interesante camino. Nuevos tiempos sin duda. Anaya apunta a ser kriptonita pura antilopezobradorista.

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