La prohibición tendrá tres consecuencias graves: aumentará la dependencia alimentaria, aumentará el costo de los alimentos y aumentará la pobreza en el campo.
El decreto revela la ignorancia de los funcionarios que impulsaron su prohibición pues piden alternativas de “baja toxicidad” cuando la COFEPRIS así cataloga al glifosato.
Hubo más apoyo al glifosato que cuestionamientos en la plataforma de CONAMER.
Países que lo han prohibido han tenido que echar marcha atrás por los costos sociales y económicos de la medida, como Brasil y Francia.
CIUDAD DE MÉXICO, 06 de enero, (MENSAJE POLÍTICO).–El decreto del 31 de diciembre del año pasado para eliminar el uso de glifosato en 2023, el herbicida más barato y eficaz en el mercado y utilizado en más de 120 países, incluido los Estados Unidos y los miembros de la Unión Europea, tendrá efectos desastrosos para el campo mexicano, dijo el Presidente de la Unión Mexicana de Fabricantes y Formuladores de Agroquímicos, UMFFAAC, el Ing. Luis Eduardo González Cepeda.
El Ing. González explicó que la eliminación del glifosato producirá un aumento en los costos de producción hasta en un 300 por ciento por hectárea y se reduciría la producción de alimentos entre un 20 y 40 por ciento, afectando especialmente a los pequeños productores de los estados más pobres del país. Esta situación obligará a aumentar la importación de alimentos, alejándonos más del objetivo de lograr la autosuficiencia alimentaria, que el propio decreto busca lograr y aumentará la pobreza en el campo, pues los pequeños productores, al producir menos, tendrán menores ingresos para subsistir.
El Ing. González Cepeda precisó que en la Encuesta Nacional Agropecuaria 2019, realizada por el INEGI, el principal problema que reportan los trabajadores del campo son los altos costos de insumos y servicios: “La prohibición del glifosato podría incrementar hasta en 25 veces los costos en el control de la maleza. Deshierbar una hectárea con glifosato costaba típicamente alrededor de 160 pesos y hacerlo de forma manual costaría alrededor de 4 mil pesos para la misma extensión de terreno”.
El Presidente de la UMFFAAC dijo también que la justificación que se argumenta en el decreto para prohibir al glifosato carece por completo de fundamento científico, pues dan por sentado que “distintas investigaciones científicas”, que nunca precisan cuáles son, refieren que el glifosato es nocivo a la salud y al medio ambiente.
El también vocero de la UMFFAAC añadió: “Hay más que suficiente información científica que respalda la política de países como Estados Unidos y Brasil que concluyen que NO hay evidencia científica que compruebe que el glifosato es una sustancia que cause cáncer”.
Un estudio de la Agencia de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA por sus siglas en inglés) llevado a cabo en los años 2016-2017, por ejemplo, demostró que no había residuos de glifosato en alimentos en maíz, soya, leche y huevos (“no pesticide residue violations for glyphosate”). https://www.fda.gov/food/pesticides/questions-and-answers-glyphosate.
Por su parte, la Agencia Ambiental de Estados Unidos (EPA, por sus siglas en inglés), concluyó en abril de 2019 que “mantiene su posición de que el glifosato no representa riesgos a la salud pública cuando se usa de acuerdo al etiquetado y que el glifosato no es carcinógeno”. En Europa, la EFSA, Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria concluyó en noviembre de 2015 que: “es poco probable (unlikely) que el glifosato represente un riesgo carcinogénico para los seres humanos y la evidencia existente no respalda su clasificación como carcinógeno potencial…” y la ECHA Agencia Europea de Sustancias Químicas, concluyó en marzo de 2017 que “la evidencia científica disponibles no reúnen los criterios necesarios para clasificar al glifosato como cancerígeno, mutagénico o tóxico para la reproducción”. (Ver Anexo 1)
Otro factor que es preciso destacar es la ignorancia u omisión de funcionarios que están en contra del uso del glifosato, pues en el propio Catálogo de Plaguicidas vigente y publicado por la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios, COFEPRIS, el glifosato está clasificado como “no carcinogénico”. El Ing. Luis Eduardo González aseveró que hay un absurdo en el gobierno: “para que buscan lo que ya tienen, si la COFEPRIS tiene clasificado al glifosato en la categoría de más baja toxicidad para que lo prohíben, es totalmente ilógico lo que están haciendo”. (Ver Anexo 2)
El Presidente de la UMFFAAC dijo también que “otra situación que llama la atención del decreto es que en el portal de consulta registramos 446 comentarios y posiciones a favor del uso del glifosato contra 77 observaciones o comentarios en contra. Es decir, ni siquiera este indicador fue tomado en cuenta por las autoridades para tomarse el tiempo de realizar, al menos, una serie de consultas o foros que tomaran en cuenta el parecer de los productores agrícolas y se evaluara con seriedad los costos, implicaciones y alternativas viables al uso de un producto clave para la productividad de alimentos como el glifosato”.
La decisión de prohibir el glifosato tampoco tomó en cuenta la experiencia de países como Brasil y Francia que intentaron prohibir el uso de glifosato, pero ante las consecuencias sociales y económicas de la medida tuvieron que echar marcha atrás.
El vocero de la UMFFAAC concluyó que “es necesario que la política pública del país responda a las necesidades reales del país, no a las necesidades ideológicas de funcionarios que simplemente no entienden o no les parecen relevantes las decisiones que toman en materia agropecuaria” e hizo un llamado a reconsiderar la decisión de un decreto que tendrá consecuencias muy negativas para el campo y para la economía del país.
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ANEXO 1
ANEXO: LISTADO DE CONCLUSIONES DE AGENCIAS REGULATORIAS INTERNACIONALES SOBRE EL GLIFOSATO
Estados Unidos
EPA Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos
En abril del 2019 en un comunicado de prensa la Agencia señaló “..la EPA mantiene su posición de que el glifosato no representa riesgos a la salud pública cuando se usa de acuerdo al etiquetado y que el glifosato no es carcinógeno”.
Europa
EFSA Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria
El noviembre del 2015 concluyó que “es poco probable (unlikely) que el glifosato represente un riesgo carcinogénico para los seres humanos y la evidencia existente no respalda su clasificación como carcinógeno potencial…”
https://efsa.onlinelibrary.wiley.com/doi/epdf/10.2903/j.efsa.2015.4302
ECHA Agencia Europea de Sustancias Químicas
El Comité de Evaluación de Riesgos (RAC) de la ECHA publicó un dictamen en marzo de 2017 donde concluyó que “la evidencia científica disponibles no reúnen los criterios necesarios para clasificar al glifosato como cancerígeno, mutagénico o tóxico para la reproducción”.
https://echa.europa.eu/-/glyphosate-not-classified-as-a-carcinogen-by-echa
Instituto Federal para la Evaluación de Riesgos de Alemania BfR
En marzo del 2015 concluyó que informe de BfR a la UE, basado en la evaluación de más de 30 estudios epidemiológicos, llegó a la conclusión de que “no existe una relación entre la exposición al glifosato y un incremento de riesgo de linfoma no Hodgkin u otros tipos de cáncer que hayan sido validados o encontrados como significativos”.
Autoridad de Protección Ambiental de Nueva Zelanda (2016)
En agosto de 2016 dio a conocer la “Revisión de la Evidencia Relacionada al Glifosato y Carcinogénesis” concluyendo lo siguiente: “…todos los estudios fueron realizados de acuerdo con las directrices de prueba acordadas internacionalmente, no se encontró evidencia de un efecto genotóxico (perjudicial para el ADN) del glifosato”.
La revisión tuvo en cuenta los estudios revisados en el informe de la Agencia Internacional de Investigación sobre el Cáncer (IARC), así como otros estudios que no fueron revisados por la IARC pero que han sido evaluados por reguladores extranjeros, incluida la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA), US Environmental Protection Agency (US EPA) y la reunión conjunta FAO/OMS sobre residuos de plaguicidas (JMPR).
Autoridad Australiana de Plaguicidas y Medicamentos Veterinarios (APVMA)
En agosto del 2017 después de una revisión exhaustiva del reporte de evaluación de la IARC y otros materiales científicos la Autoridad Australiana concluyó: “llegamos a la conclusión que no hay razones científicas para quitar el registro al glifosato. Nuestra posición es que todos los productos con glifosato registrados son seguros siempre que se utilicen de acuerdo al etiquetado”.
https://apvma.gov.au/node/27261
Global
Reunión conjunta de la FAO/OMS sobre Residuos de Plaguicidas (2016)
En mayo de 2016 la reunión conjunta concluyó que “es poco probable (unlikely) que el glifosato sea un riesgo carcinogénico para los seres humanos a través de la dieta”.
https://www.who.int/foodsafety/jmprsummary2016.pdf?ua=1
Canadá
Autoridad Reguladora de Manejo de Plagas (PMRA) Canadá (2015)
En abril del 2015 de acuerdo con el Documento Decisión de la Reevaluación del Glifosato se concluyó que “la evaluación de la información científica disponible reveló que los productos que contienen glifosato no representan riesgos inaceptables para la salud humana o el medio ambiente cuando se usan de acuerdo con las instrucciones de la etiqueta propuesta”.
https://www.canada.ca/en/health-canada/services/consumer-product-safety/pesticides-pest-management/public/consultations/proposed-re-evaluation-decisions/2015/glyphosate/document.html
Brasil
Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria de Brasil, ANVISA
En febrero de 2019 a través de un comunicado ANVISA señaló lo siguiente: “se reevaluó la información sobre los riesgos del glifosato y se ratificó que no provoca mutaciones en el ADN, en el código genético humano, ni en embriones o fetos, no es cancerígeno y no es disruptor endocrino y no afecta la reproducción”.
ANEXO 2
Página 314 del Anexo I del Catálogo de Plaguicidas 2016
entregado por la Comisión Federal para
la Protección contra Riesgos Sanitarios, COFEPRIS
La Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios, COFEPRIS, órgano regulador de Salud en México tiene clasificado al glifosato en las categorías de más bajo riesgo en las bandas azul y verde.
Deshierbar una hectárea sin herbicidas puede costar Controlar la maleza en una hectárea con
alrededor de 4 mil pesos. glifosato costaba típicamente alrededor de
160 pesos (aplicándose no más de 2 litros por cada 10 mil metros cuadrados diluidos en 100 o 200 litros de agua).
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